El invierno trae consigo una caída en las temperaturas y, con ella, un conjunto de desafíos para el cabello. El frío puede hacer que nuestro pelo se vuelva más seco, quebradizo y con tendencia al frizz. Para mantenerlo hidratado, suave y lleno de vida, es esencial adaptar nuestra rutina de cuidado. Aquí te dejamos algunos consejos útiles que puedes incorporar a tu rutina diaria para proteger tu cabello durante los meses más fríos.
Una de las claves para cuidar el cabello en invierno es ajustar la frecuencia de lavado.
- No es necesario lavarlo todos los días, ya que los aceites naturales que produce el cuero cabelludo son una excelente defensa contra la sequedad. Si puedes, reduce la frecuencia a dos o tres veces por semana.
- Utiliza champús y acondicionadores ricos en ingredientes hidratantes como el aceite de argán o el karité. En Cocada encontrarás opciones muy buenas disponibles para esta temporada.
- Intenta usar agua tibia al lavar tu cabello; el agua muy caliente puede eliminar la humedad y dañar la cutícula capilar, mientras que un chorro final de agua fría ayudará a sellarla, dejando el cabello más brillante.
La hidratación profunda es fundamental.
- En invierno, es especialmente beneficioso incorporar una mascarilla nutritiva una vez a la semana. Déjala actuar unos 15-20 minutos para que el cabello absorba sus propiedades hidratantes.
- Los aceites capilares como el de coco, almendra o argán son perfectos para el cuidado de las puntas y para sellar la humedad. Solo tienes que aplicar unas gotas en las puntas y verás cómo el cabello se mantiene suave y manejable.
El frizz es otro enemigo del cabello en invierno, provocado en parte por los cambios de temperatura y la falta de humedad.
- Para combatirlo, puedes probar con un acondicionador sin enjuague, que actúa como una barrera protectora contra el ambiente frío y el viento.
- También es útil cambiar las toallas de felpa por toallas de microfibra, que generan menos fricción y, por tanto, menos frizz. Al secar tu cabello, evita también las herramientas de calor tanto como sea posible, y si las necesitas, asegúrate de aplicar un protector térmico y mantener la temperatura baja.
El uso de gorros y bufandas también puede ser problemático para el cabello en invierno.
- La fricción de estos accesorios tiende a causar encrespamiento, especialmente si son de lana o algodón. Una buena idea es elegir gorros que tengan un forro de seda o satén, materiales que protegen mejor el cabello.
- Si tu gorro no tiene este tipo de forro, puedes coser una capa de satén en el interior o incluso usar un gorro de seda debajo del gorro exterior.
- Para evitar que el gorro arruine tu peinado, recoge el cabello en una trenza suelta o un moño bajo antes de ponértelo; así, evitarás el encrespamiento y mantendrás el estilo.
Por último, es importante recordar que el cuidado del cabello no es solo externo. La alimentación juega un papel esencial en la salud capilar. Alimentos ricos en vitamina E y ácidos grasos omega-3, como el pescado, los frutos secos y el aguacate, ayudan a fortalecer el cabello desde el interior. Y aunque en invierno solemos olvidar beber suficiente agua, la hidratación es crucial para que el cabello se mantenga sano y resistente.
Con estos cuidados sencillos, podrás disfrutar de un cabello saludable y protegido durante todo el invierno. Así, tu melena estará lista para enfrentar el frío y lucir espectacular, sin importar la temporada. ¡Y no te olvides pasar por Cocada para retocar las puntas!